lunes, 23 de diciembre de 2013

Mandarina

Uno de estos días voy a perder
contra mí.
Y voy a tener que escribir desde
el tope de este recipiente
que llaman corazón.

Aquí otra vez besando a la
cerveza y es en diciembre
cuando bebo más, también
debo confesar.

Aumenta mi carácter depresivo,
lo mismo que a mis uñas
cuando crecen; lo recorto
un poco. Pero no me libro
de ninguno pues todo eso es
parte mío.

No es que tenga un problema
oftalmológico es que estoy
partiendo la realidad ante
mis ojos.

La pragmática de un like
es como creer en ese
Dios bíblico tuyo.
Diecisiete semillas de
esta mandarina.
Y ya caigo. Todo un vórtice
de lo que me ocultaste, perra.

Se acaban las dudas y empiezan
los poemas.
Qué tiempos aquellos, de esa
ignorancia sabia.
"Me drogué con música toda
la noche", me dijo Saúl.
Pensándolo bien, todos somos
sicarios existenciales.

Así es la vida, si dices:
"Estoy en la verdad", estás
en la mentira y si dices:
"Estoy en la mentira", también.

Y así, entre más presupuesto, más
feliz la navidad.


-Alejandro

sábado, 7 de diciembre de 2013

Los hábitos de mi egoísmo

Haz tus abortos poesía.
Creo que no comprendiste
el simbolismo de nuestro
rencuentro aquel día,
nos vimos en una explanada
y terminamos en un panteón,
¿no  ves?, nuestra amistad
en el mismo día renació y
murió mientras yo te leía el tarot.

El único madre/padre es el
pensamiento, los demás;
usurpadores famosos.
Tienes una nueva oportunidad
cada y que respiras hondo.

Ella estaba muy decepcionada
de los humanos.
Las mismas bromas de todos
los años.

Muchas madrugadas caminé en donde,
la única salida del callejón,
eran panteones y perros furiosos
que filtraban su
rabia cuando se aproximaban.
Yo con mis audífonos,
doce años en mi precoz viaje
iniciático.
Ese pino iluminado en diciembre
que te entretiene para aguantar
todo el año.

Los camiones que yo tomo sí
permiten bebidas alcohólicas.
Este plano de existencia es
un susurro para mí.

Botellas vacías de mezcal
abandonadas en el metro subterráneo.
Me subo al camión y en cada esquina
una maravilla foránea, regresando
a casa donde los dueños de la Sierra Madre
se esconden tras su taza de café.

Tal vez no vine a ascender a esta vida,
y debo tomar la espada y morir otra vez.
Igual me equivoqué y aún
no estoy listo y debo dar mi
vida como "ejemplo".
Sin activismos inútiles, sin protestas
mediáticas, sólo tomar la espada y
buscar al hombre gris.


-Alejandro

lunes, 25 de noviembre de 2013

Inteligencia suprema

Yo no quiero "triunfar en la vida"
sólo quiero escribir pseudopoesía.
Hacer guiones y grabar garabatos.
Guardar un machete bajo la cama.

Renuncié a todas las ambiciones
convencionales. Te besé en hologramas
mentales.

Yo no quiero viajes de turista, ni
la punta del iceberg. Quiero
sumergirme en cada gueto del mapa.
Mi contendor de edades.

Con esta maquinaria de los dólares
yo simplemente no puedo hacer
simbiosis.

Aquí una pequeña historia: Érase una vez
una mujer cuyo esposo era el hijo de Dios.
Lo mató y cobró el seguro, y con él compró
coronas, países y todos los bancos del mundo.
FIN.


-Alejandro

domingo, 17 de noviembre de 2013

Malegría

Para aquellos que tratan
de darse la vida de un
neoyorkino.
Los perros y los gatos
juegan toda su vida.

¿Para qué saber tanto?
¿Para qué? Para enseñarlo.
Tus diplomados serán
los libros que leas.
Tus cursos serán las
nuevas amistades profundas.
Tus especializaciones
será todo aquello que
puedas enseñar.

Aquí pierden sus poderes;
desde Buda hasta Jesús.
Mi religión es la vida.
Mi oración es la felicidad
donde sea que ésta radique.

Soñé que le escupía al
pesebre, ahí donde
comen las bestias.
Entiende curador las bellas
artes en realidad son
las feas artes.
Aquí podrán desfilar todas
las razas y aún así su esencia
inmortal luce en todas igual.

Después de tanto libro, música,
fotos, pinturas y feas artes,
no soy ni la pizca de lo que 
voy a ser.


-Alejandro

Lo puedo ver en tu peinado de mujer infiel

Ando respirando gamma y
cianuro en humo.
Mi altar consiste en todo
lo que falleció en ti.
Yo no lo puedo creer,
la mujer que eres hoy.
Estás ahí en la caca
del caballo que monta tu esposo.

Quisiera participar
y darte gusto. Pero el
"pero" no es peligroso
y soy antitodo.

Las montañas y su magnetismo
¡¿Monterrey dónde estás?!
Si insectos caminan en tu boca
déjalos alimentarte. Que te
sirvan el café. Yo llegué
a servirte el café.
Cuidado si los católicos
se vuelven punks.

Pinche borracho de tumba.
Quiero matar a mil
coreanos tatuados.
Yakuzas también, Ziabatus también,
hombres grises, rojos, amarillos
también.

Accedo a mi infancia, adolescencia,
adultez y longevidad a la vez.
Lo puedo ver un tu peinado
de mujer infiel.


-Alejandro

jueves, 31 de octubre de 2013

Hojita de parra pa' la desnudez

Ojalá dejar de ser
un homínido.
De Hades a Zeus, ganar
una medalla para hacerme
inmune en Grecia.
Los interestelares se
sorprenderían si vieran
nuestras botellas de cerveza.

Ah, qué burbuja tan necia
que no revienta.

Por favor Chaikovski ven
antes de Navidad a quitar
todas las máscaras.
Basta de eras del rock,
mi lengua no puede
sangrar más.
Yo no soy tú.
El mundo es una
carnicería muy cruel.

No la tienes.
La ciudad va de un uniforme
a otro.
Te abandona, está bien,
eso significa que pronto
llegará a otros.

Y derrepente Chavela
Vargas es Patti Smith.
Todo para descubrir
que la verdadera fábrica de
sueños se llama Cuauhtémoc-Moctezuma.


-Alejandro

México

Estaba trabajando
entre abrazos, sudor
y risas falsas.
Hoy más que nunca
la sonrisa es FALSA.

Hoy no tengo pa'
cerveza pero tengo
agua de la llave
que me pone igual
bien loco.
Podría saciar la sed
del mundo o en cambio
ahogarlos a todos con
tsunamis.

Estamos todos "así" del
psiquiátrico por culpa
de todos tus vientres
sagrados.

Me voy a tatuar por
gusto y también
por disgusto.
Tal y como dicen
los que escriben:
"El sonido podría ser Dios.
Es omnipresente, omnipotente,
y metafísico.
La música, una iglesia".


-Alejandro

Sonrisa, llanto.

No descuides tu camino
por seguir el de otro.
Los de piel verde que viven
debajo, en el centro, entran
a tu cuarto mientras vas al baño.

¿A quién cantamos?
¡¿A quién cantamos?! ¡Mierda!
Sino al Ser.
Esto que no es gripa
sino llanto legítimo.
Lloro por toda la
humanidad, por cada estrella
apunto de expirar.

El que habla no sabe nada.
Sonrisa, llanto, mentira.
Sonrisa, llanto, mentira.
Sonrisa, llanto, mentira.
Sonrisa, llanto...
¡¿A dónde vamos a parar?!...


-Alejandro

martes, 15 de octubre de 2013

Aquí puras desgracias

Estoy obsesionado con las
huellas digitales.
Con los pinches ojos rojos
de conejo de laboratorio,
en el río en el que voy.

Estoy perdido entre palabras,
palabras que huelen a
incienso. Quiero a una mujer en
peligro de extinción, quiero
menos budistas y más vidistas.

Las cortinas se están
abriendo.

Me agüito cuando no hay
caguama oscura, me agüito
cuando otra güera se me
escapa. Aquí puras desgracias.

Podrás hablar del
futuro a condición
de esfumarte.
Pero aquí puras desgracias.

Todos los lugares
donde estuve allá en
mi infancia.
Tu voz de dragón.



-Alejandro

lunes, 23 de septiembre de 2013

Trece

Nadar bajo tierra
en las profundidades
del carbono sintiendo
la nariz sangrando.

No es casualidad que
el árbol nos esté
mirando; quieto,
silencioso, sigiloso
en vaivén discreto.

Los navegantes temen caer
al mar, los peces temen
salir de él.

Por la ventana entran
hasta mi cuarto los
carros que afuera atropellan
charcos de aguas negras.
Residuos de un huracán
de perfume rancio del
siglo quince.

Con tu cabello hecho
un capricho del año
dos mil trece.
Donde mejor prescindo
de tus patrones de
la estética.

Vamos a ofrendar a toda deidad.
Vamos a ufanarnos en exceso
por todo lo que no tenemos,
como buen regio, y partirle
la madre a la humildad
y a la sabiduría.

De esta gente nueva, de esta
pinche generación.
Gente de alberca
y lentes de sol.
Esta breed
de lentes sin aumento.

Aquí estoy de pie "como te llames"
aquí sobre un protón viendo tu
obra germinar.
Aquí con el órgano fúnebre,
esperándote.


-Alejandro

domingo, 25 de agosto de 2013

Yo no leería esto

Un cangrejo se dibuja
en la noche de mis ojos
cerrados.

Tus libros del mañana
los escribes justo ahorita.
Mereces las cucarachas que
están comiendo las palabras
que flotan en ellos.

Ya ves que no sirvieron
tantos cantos, ni coros
mentales invertidos
en causas perdidas de tus
amores obsoletos.
Ya ves de tus romances
pendientes, interrumpidos
por la edad y la geografía,
sólo quedó un holograma.

Quiero tu ubicación exacta
y luego pienso que el
suicidio de Waldo es
contagioso pues
vino al mundo moribundo.
Ese mundo que surfea
en una de tus lágrimas.
Con más de mil corales
reforestados, la noticia
de ficción en su género.

Ya no espero la lluvia
de flores y lágrimas de plata.
Ni tampoco a las sirenas calvas
ni la sinfonía del grillo, todo
ello narrado en aquella cruel etapa.
Ya que se abran grietas,
ya que se levante la Tierra, ya me
vale verga.
No me importa que
más gente muera, que mueran
las colonias y que nazca
lo que tenga qué nacer.

Todo lo que construya
recintos para expandir
Consciencia.
Toda la corrosión de
mi ánimo está siendo
eclipsada por esta droga
que no es droga y vive
y llora en mi corona.

El eco de una risa.
Tu nueva patria está en
camino.
Voy a extrañar a los
árboles de esta nación.

Eso que quede claro,
para escribir, no se
necesitan manos.


-Alejandro

martes, 13 de agosto de 2013

Creo que lo sabes muy bien

Quisiera estar parado en
el zacate subiendo la mirada
y lanzando añoranzas al vacío
de la noche a cero grados.

Buscando las raíces de la anacua
donde trepaba el centipedo azulejo.
Quiero flotar sobre el zacate y
quiero abrazar la montaña ya
abrazada por las nubes.
Quiero ser un demonio japonés.
 
Leer pura poesía local
es como ser eunuco
pudiendo ser Don Juan.

Las estrellas son destinos y las
próximas paradas.
Quiero que el zacate sea mi

destino y mis próximas paradas.


-Alejandro

miércoles, 7 de agosto de 2013

La maquinaria del destino

Perdí a propósito tu cara 
de esqueleto de bruja para 
esta orgía de palabras
que a un poema van a gestar, parir.
Canción de la ritmia cardíaca
y el camino del caballo.
A veces me pasa, no quiero salir de casa.
A veces me pasa, prefiero estar
con los perros. No pesan los cuerpos
en el agua. 
Casi no puede sonreír
puesto que trae la nada en su bolsillo
y sus lágrimas congeladas.

Tiene belleza suficiente
para provocar mucho dolor.
No muevas la vista que
los átomos desaparecen.
La mitad de este pan
para mí y la otra para la
superconciencia, los pájaros
y las hormigas del tonto que
fui hoy.

El tonto que hasta el fin
defiende sus tonterías
porque a todo quiere ponerle
correa.
 
No progresa, éste, 
tu amor industrializado.
De la cama al volante, del volante
a la carretera y en ella no resisto
a otro perro atropellado.

Las lechuzas son maldita poesía,
poesía maldita. Hoy pasé por la
casa de una vieja disfrazada de joven.
Y hoy pensamos, mañana
reímos. Hoy filosofía, mañana
poesía, bien dicen que son gemelas
la risa y la sabiduría.

Lo único que pido es una
planta que sea pelirroja y de
ojos rasgados y que hable
español, que sea todo lo que
yo no soy.

Mientras sostengo en mi mano
una chiche de Isadora.
Esto es como en el sueño donde
brillaba tu corazón y tu mente
y donde las balas no te alcanzan
porque ya empezaste a volar
en el ahora.


-Alejandro

lunes, 22 de julio de 2013

Aborigen abducido

Mi aborigen abducido con tu 
Jesús mal digerido de tus cuatro 
inteligencias y amores obtuve la
experiencia hertziana del infinito 
desconocido.

Tu amor físico; como animal, la genética te guía.
Tu amor sexual; incinerante nos construyes,
preservas y destruyes en bucle indefinidamente.
Tu amor emocional; de mil poetas mal citados, 
lanzándome bombas de hormonas con megatones 
de sentimientos difusos.
Tu amor racional; cuya espada de intelecto 
termina conmigo para siempre.

Eres premonición de lo que hoy llaman ángel 
interdimensional, triángulo en el núcleo de 
tus células estás.
Un mensaje del eletctrum; a una computadora
nunca vas a fecundar.
Y mientras tanto, sigue construyendo cosas 
que te aplasten.
Qué bonitas tecleando toda su vida, las marionetas 
están cayendo del subsuelo. 

Yo prefiero el trance de tus propias hormonas 
pineales que tu celo por aquello que inercambias 
por dinero.
 
Finalmente detrás de tus preguntas te ocultas
mi aborigen abducido porque Jehová no cesa 
de violarte tus más ilimitados pensamientos.
Censura a tu sistema que hoy se apaga sin 
conocer la iluminación.
Sin cantares de las cinco notas que provocan 
la lluvia en éstos, los tiempos que vives... pero no vives.


-Alejandro

martes, 9 de julio de 2013

La ruta diurna

Sin miedo vamos
al centro de la Tierra,
las aguas heladas de este
río subterráneo.
Que no hay mejor brujería
que el pensamiento.
No hay pasaporte para visitar
la luna ni visa para llegar
a tu punto de ebullición.

Hago las paces con el mundo
y nunca más los vuelvo a ver.
El sol me cantó dijo aquel 

personaje.
Enroque al rey, caballos que
transpiran sus jinetes de
toda la vida.

Vamos a sembrar vidrios,
entre los surcos de nuestras
dactilares, líneas de Nazca.
Vamos cosechando espejos
del alma porque son los
animales silenciosos de los
más peligrosos.

Todo está muy calmado pero
la realidad es más ruidosa.
Gran proceso de ignorancia
tuve qué atravesar para
llegar a la conciencia y energía.
Como quien alardea todos sus
trofeos en el porche.
Imago antes de poder volar.

Fuera de mis audífonos todo
es feroz guerra. Que hasta
tus rodillas son bellas y
como mi obra póstuma; reunir toda
la tristeza del mundo, cada gesto de 

amargura, de melancolía, cada arruga y
cansancio para encomendarlo
todo a las palomas.



Alejandro




viernes, 21 de junio de 2013

La belleza del peligro

Sentado en aquel bar, observas
a ese tipo, ese rostro familiar.
Es el sacerdote del pueblo
respirando la belleza del peligro.
Que la luna no te distraiga.

Ya existes de nuevo, eres un clásico.
No quieren que emita jucio, buscan
saciar su soledad con la transmigración
silenciosa que viaja para extinguirte.
Tu voz dirige la nave. Substancia musical.

Una orquesta encima de un asteroide
va a reducir a cenizas el planeta plagado
de clones. El planeta te da las gracias 

a su manera.
La montaña respira lo más hondo posible.
Y quítate los lentes con los que
me ves, porque de mí estás teniendo
una perspectiva muy ignorante.

Las hojas secas entran a cada portazo.
¡Cómo ladran los perros en celo con
esta luna tan llena! Como si pudiera
sembrarse sobre el aire. 
Que la luna no te distraiga.
Que bendigo a todo lo que es y lo 

que aún no es.


-Alejandro




viernes, 7 de junio de 2013

El material divino

Bailando sobre una ouija eres la cerámica
que lleva años conmigo.
Tus pies son dos mandalas, tu seis manos.
No mueres lentamente sino, lentamente,
te das cuenta que no puedes morir.

Esperas un día curar con tus manos pero
qué mejor cura hoy, que no enfermar siquiera.

De esa casa sale música muy bella y
espectadores, dóciles y crueles a la vez,
oprimen al músico en vigilia.
Ellos forman filas frente a la pirámide, fuego
en su centro, nada lograrán, ni
a un costado, ni encima. Deben
estar dentro, fuego que eres de
su centro, si quieren que algo suceda.

La música es una ave mítica
que reencarna con cada generación
y la poesía, que alimenta
todos los géneros; una
perla que va de mano en mano
en cada década. Para así plagar al
mundo de mutantes, colecciones de
vidas.

Pedí mi nombre en las nubes y así
ha ocurrido, levanto la mirada. Me
disuelvo, moléculas, polvo, luego
inteligencia suprema.



-Alejandro

miércoles, 15 de mayo de 2013

Holograma de mil pétalos

Estás en la cara del diablo y luego
crees que sufre el de a lado. Te afliges,
pero eres tú el único ser sufriendo.

Cierto, Mahoma tenía razón el cerro por fin se movió.
Tu primera palabra fue olvido, tu última olvidado.
Se fue la luz, pero no tu luz. Esa perduró para siempre
inmortal como holograma de mil pétalos.

Mi tornado de quince segundos, te confundí con un
depredador pero recordé que sólo habitan en la ausencia
de luz y ese día estaba muy iluminado para ser posible.

Si estás corrompido no existes. A medida que el vaticano
se hunde yo siento más amor hacia el mundo.
Melodía que siempre estará allí para recordarte a qué has bajado
a este plano.

Vengo testigo de la mujer postmoderna con su ciencia del
glamour. Predicadores se equivocarán todos los domingos.
Viajas a través de todas las conversaciones que
existieron en el mundo recopilando suficiente humildad,
la necesaria para escuchar esta poesía que te despega
un poco más del suelo, que permite que tu sueños se salgan
de la caja.

La lluvia es música de fondo. Siempre ocurren muchas cosas a la vez.
Una canción convertida en acrónimo, la vida
minimizada a un acrónimo.

Cuando te conocí pensé que eras una canción pero respiro el aire
más puro incluso en el vacío y estoy por encima de todos los problemas
del mundo.
Tu tierra es un concurso de ver quién sufre más, ya no sufras más.
Enfoca todo tu ente y me entenderás cuando te mueras.


-Alejandro

jueves, 25 de abril de 2013

Los insectos son la clave (LISLC)

En pláticas adivino de pronto 
el simbolismo, ése que siempre 
entra hasta tu cocina sin hacer ruido 
y que está en cada hecho que 
prefieres omitir.
La pluma; tu herramienta, la premonición 
femenina; la mujer de belleza tosca, 
apellidos; sus apellidos.

Eres y serás responsable de cada tirano 
y de cada mesías.
Yo también estuve encantado contigo, 
enamorado de los climas perfectos 
que creabas y de todos tus axiomas.
Pero prefiero no fumar, yo ya dejé ese 
chupón simbólico.

La poesía nos protege, su aroma nos guía.
Y a la fecha recordé que mi más grande 
secreto sigue siendo el mismo.
Las luciérnagas son carnívoras y los insectos son la clave.



-Alejandro

sábado, 20 de abril de 2013

El útero de la abundancia

Que morir no duele, te han dicho siempre.
Que los aplausos sean genuinos como aleteos
de parvadas matutinas sobre tu cabeza.
Que llevé mis ocho virginidades con tal de
tener un gramo tuyo.

Nunca lo supiste, pero dejaste caer tu nombre
a propósito con tal de curar todos los males
de la psique. Puesto que cuando naciste
tu gente tomó tu Yo y lo lanzó muy lejos con el
reto anejo de que lo encontrases a través de los
anales de tu vida, y más tarde, encontrarte y así
por fin liberarte. ¡Qué maravilla!

Sin coros preguntas cuántos fotones chocan contra
tu alma. Qué bellos cisnes sobre el lago que pisas
y, sierras filosas, todos van muriendo en hileras
para alimentarte. A ti y a los anillos de humo
que produces mientras te fumas al universo vacío.

Y recuerdas tus vidas pasadas, y recuerdas tus
vidas futuras. Y recuerdas este par de ojos.
Y cualquier mantra es poderoso mientras lo digas tú.

Y hoy todos los niños son Lamas.
Soy el útero de la abundancia.


-Alejandro

miércoles, 10 de abril de 2013

Teoría del encanto

La humanidad tan inmersa, 
cada quien en su papel, sin sospechar 
del gran frío que se aproxima a la Tierra 
a toda velocidad.
Con un viento que echará volando a 
todos esos papeles.

Pero tú, criatura maravillosa que vives
la teoría del encanto en el recuerdo 

de tu jardín sepia, aquél de girasoles 
que rosaba tus yemas. Tú nisiquiera
vives aquí, tu mundo está más lejos 
de este plano.

Algo buscas en la pared sin descanso, 
esas formas que te castigan la imaginación. 
Te hablan personas que te ven muy grande,
personas que te ven muy pequeño e incluso 
te hablan, en este momento, los que no te ven siquiera.

Testigo de cada personaje, historia fallida de la 
humanidad, desde Omeka hasta Colón, 
Asis, Mozart, Joseph, Apolonio, Zaratustra, Ra-ta-Bin,
Bonaparte, Platón, Siddhartha, todas 
las almas perdidas pero también todos los maestros, 
música sin instrumentos fluye y tiene aroma. 
Cada maestro que asciende,
¿Por qué los ves? te cuestionas, hermosa criatura.

Viene el silencio y de pronto esa sospecha 
que siempre te caracteriza, la música va 
en reversa, ¿qué pasa? preguntas riendo 
pequeña criatura, indagas en medio de un 
plano dorado en su atmósfera, comienzas 
a dudar del suelo y entonces recuerdas todo.
Un insignificante tren y tú dentro, choque y 
fe de erratas en sus accidentes.

Luego tantos insectos, imposible de creer, 
y te ves, el único ángel en ese espacio, los 
átomos ya no te poseen.
Veneras al pensamiento y ahora gustoso 
aceptas la verdad cronológica.
Has muerto.

Quieres volver, esta vez más sabio, más 
fuerte y más humilde, copulación te 
da paso, luz para atravesar el cuerpo físico, 
invadir y conquistar este plano de subconciencia. 

La música ya no va en reversa, lloras pero 
en un tono que no irrita a las manos que te reciben.
Año dosmil cuarenta y dos y ahora te toca 
reconstruir la música de otros niveles, naces atrapado en el sonido.
Estrella te llaman, hermosa criatura.
Has renacido.


-Alejandro

sábado, 6 de abril de 2013

Isómeros

La triste paciencia para reforzar tu identidad 
usando mentiras virtuales.
Tu pasado mortal resuena a tu pasado inmortal.
Y yo desde la Atlantia 
voy desahogándome... despacio... por cada poema 
que se escribe en el mundo.

Los bordes de tus uñas te delatan, cabos litorales atestiguan 
el gran proceso.
El clima nos gritaba cada semana con sus 
cambios abruptos, era surrealismo puro 
pero la gente sólo se quejaba sin darse 
cuenta del llamado, escuchando canciones 
que nisiquiera saben que existes.

Mi conciencia diferida dos segundos, de modo que, 
para cuando me percataba de mí, 
ya eran dos segundos tarde.
El clima diferido dos segundos tarde, 
de modo que, para cuando enfriaba y llovía
el incendio ya había terminado en el pueblo mágico.

Y lejos viene el caballero que monta a la zebra 
y lejos viene el espíritu que monta un corcel negro 
y se desliza en el aire lanzando fuego al respirar, 
confundido con dragones.

Hoy te encuentras caminando en el desierto 
de la Sultana con dos bestias, un caballo y una cabra,
experimento genético que termina en unicornio.

Y le gritas al mundo que te has iluminado y que tu 
vida no ha sido en vano, nunca ha sido en vano.
Pero nuevamente el desierto de la Sultana te absorbe, 
hoyo negro de neocórtex. 
Hoyo blanco que engendra egos, isómeros que asustan, 
puesto que parecen algo pero no son algo.


-Alejandro

viernes, 15 de marzo de 2013

So real

Descifras el futuro a tu manera.
Paseas por todo el mundo y en
cada lugar escuchas las voces de
tu familia, los llevas contigo.

Distorsiones, aquí vienen, y a ti
te llevo puesta a donde voy, como
a una prenda eterna.

He visto demasiados átomos en mi vida.
He visto sangrar tu nariz y tu cerebro en
explosiones.
He visto tu determinación ante las fobias
más profundas.
Te he visto llorar con tu canción predilecta,
hoy sé que te veré por encima del suelo,
vibra tu pensamiento  y brillando nos
despediremos en esta existencia.

Por último diré: "Fue un placer".


-Alejandro

miércoles, 13 de marzo de 2013

Aegis

Furioso estás, miras la flor germinación que avanza.
Pero no sabes sobre la evolución, 
simbiosis que anda sin hablarte.

Tu vida, disfrutas su existencia que ve los 
cráneos que le hablan.
Disfrutas, danzas, ríes de ebriedad. Todos los 
prejuicios aterrizan en óxido ruido amenaza.

Desde el nórdico hasta el intraterrestre, te quiero 
confesar que esta noche no habrá luna.
Testigos sólo las ratas, vacío que nos vio nacer.

Este escrito no es para poetas, ni es para lobos, 
ni ladridos. Manos ya no reaccionan, 
la fuerza que te llevaste.
Es muy corto no intentes descifrarlo, ni poseérlo.
No intentes cantarlo, ni citarlo que nunca ha sido tu asunto.


-Alejandro

sábado, 9 de marzo de 2013

La música congelada

Conversamos, mi pensamiento es la luz no visible y tu rostro la visible.
La realidad es tuya, por eso el mundo es tuyo.

Siempre duermes con una lámpara, no por temor, sino por ermita, y aunque solo
y desterrad@, puedes sentir los latidos. Latidos de un hombre desde el polo norte, 
que en algún lugar vigila pequeña hormiga en el planeta gigante.

De pronto, sientes que existir no es suficiente y emprendes
absorber todo el ruido para luego vaciarlo todo en hojas en blanco.

Una mosca vuela hacia ti a toda velocidad para besarte la mejilla,
desde luego, tú la mataste un segundo después.

Tienes un registro en tus manos, ponlo en tu bolsillo y permite que tu bolsillo hable
también, que hable de tu dinero imaginario...

Y ahí vas caminando por la orilla de tu sombra cuántica, embalsamas tu propio cuerpo y
entonces dos galaxias se disuelven en el sexo opuesto.

La pared no es tu piel, la cama no es tu piel. Sólo necesitas cuatro respiros.
Un respiro por la mente, un respiro por el corazón, un respiro por tu sexo y uno más
por tu organismo.

Tienes muchas razones-mentiras; ego imaginario, amor imaginario, sexo imaginario y dinero imaginario.
Pero hay una más profunda que sostiene a todas las demás.
Tienes un espíritu omnipotente sosteniendo todo tu cuerpo, tu familia, tu ciudad y tu raza.

Alquimia; de la materia al pensamiento. Escuchas latidos...
...despiertas.


-Alejandro

martes, 5 de marzo de 2013

Milonga

Puedes ver la trama que dejan tus movimientos.
Puedes ver, árbol horizontal, a tu Dios vertical.
Brazos que al insecto que no puedes atrapar.

Ciento treinta y ocho rostros culpables,
aguarda, que el invierno tiene algo qué decirte.
Algo qué decirnos palabras huecas, ramas secas.

Todas las cosas deseas preguntar sé paciente.

Atenta, atento cuya lobotomía espuria. 
Senos que te sirven, impotente malestar. 

Los brazos antes, ahora antenas, bránquias sutiles. 
Lloras directo a las estrellas.
Cantas mortal.

Un beso interestelar impacto presente.
Reproches y llantos secos sin un por qué.

Y tu luz ya incontenible por fin se une, reencuentro con el mar.


-Alejandro

domingo, 3 de marzo de 2013

Tírame



Tu rostro tan infiel como cada noche,
como cada siglo.
Intentemos nuevas terapias, resultando el mismo producto.

Cuerpos inertes que no tienen remedio, cabezas
de lobo y oso amigo traicionero bajo el agua.

Vértigo de noche y registro de un transcurrir tan poético, matar es la
vida, hoy tienes el control, la belleza no infiere, sólo extinguir su cuello.

Su cuello firmemente en su respiración que te nubla la vida en amaneceres 
no deseados.
La biografía realizada en su conversación importante.

Tu sueño, el regreso a casa caminando y tú volando con música del nuevo siglo,
sonidos estimulantes de la mente y más aún.

Hoy te miras al espejo y no eres quien pensaste, aparece su rostro, el ser milenario
de hace eones en tu espalda, lo miras y recuerdas tu último romance tan patético como
tu rutina diaria.

Migración definitiva al bosque, nunca más te veremos apostar por
la máxima capacidad del ser, hoy  fue tu última decepción, tu última depresión y tu 
última digestión.

Tu última esperanza, tu rostro supera a la música clásica y dónde verás algo así.


-Alejandro

lunes, 25 de febrero de 2013

Color

La sensualidad de tus cuatro miradas. 
Epilepsia tímida.
Apenada exhalando estás. 

Inteligencias de todo el día, 
de toda la noche y de todo el precámbrico.
No te extingas, aún resta entendimiento 
y marchas ya hacia con tu hermanos.

No estamos listos para ver tu 
incandescente cuerpo todavía,
aún escuchamos arpas creadoras. 
Vegetal-animal, huevo-semilla.

Verde apeteces hoy, imposible no acordarme de ti, 
mi amor, mi odio.
El amor se vuelve terrible odio, y el odio 
regresa a su estado natural que es ese aroma 
tenue de tu amor.

Estoy abrumado puesto que tu sonrisa 
está reproduciéndose en mi pituitaria 
hasta volverse carcajadas que me fusilan.
Putas figuras fonéticas.

Ahora río diabólico y tus risas son gritos 
de mil gatos muriendo, muriendo 
exquisitamente en mis dos manos,
respiras antimateria y tus últimas palabras: "Gracias por darme la muerte".


-Alejandro

sábado, 23 de febrero de 2013

Natus

Te llama el reflejo de tu inspiración
la fuente de tu sorpresa, miras 
¿desde cuándo has mutado?
Nunca duermes.

Hacía eones que no recorrías 
los centímetros de tus células 
clonadas.
Cada rasgo que omitiste 
hoy te revela el resultado.

Te has mirado anoche, epifanía 
del coral en tu rostro
gran maestro que eres sin saberlo.

Como Kraken bastardo deseando 
la luna de Neptuno teniendo una propia,
tan preciada perla. Sientes algo muy extenso.

Los colores de la luna.

Ahora no existen más como tú 
a quién reprochar, el lapso del tiempo caducó.

¿Dónde estás? Apunto de nacer.


-Alejandro

Maneki-neko

Los violines que vibran, moscas que en tu oído 
formaron comunidad extensa.
La gran transición en tu boca que 
aguarda hasta el siglo XXIII.

Sientes cómo expiras los parásitos 
de tu mascota.
Tu epitafio, última exhalación 
a la cara de Dios.

Atento estás porque esta canción 
te remonta a aquel lugar de tu 
infancia atónita, a tu juventud
donde colapsaste y a tu vida pasada, 
quieres cambiar.

Cuántas esvásticas no has visto ya, 
cruces, circones y melodías tenues 
de tu guitarra.

Llevas un gran dolor desde aquel día, 
mírame, te ofrezco la cura.
Decides partir como si nunca nos conocimos, 
prefieres tu profundo dolor.

Miras fíjamente ese objeto, único portador 
del mundo no-onírico y tu mente 
reacciona, se transforma en cada molécula 
del objeto, obsequio al exterior de tu cuerpo, 
ilusorio, pero inmortal.

Escupes el esputo de culpas directo 
a tu familia, tus ancestros uno tras 
otro hasta llegar a ti mismo en aquella 
vida pretérita que has sido avatar.

Piensa más, indagas y de pronto 
retornas al regalo... del presente.


-Alejandro

Jehová: Homosexual sin remedio

Cuando comenzamos a escribirte, 
estábamos ebrios de vino, nos sentíamos 
profetas de este siglo. Apareció paraselene.

Nuestra casa celeste, querida Tierra, 

desvió un asteroide, lo convirtió en meteoro 
de órbita grande pero seguimos escribiendo y bebiendo.

Pensamos en fractales de realidad que en dosmil 

años sucederían. 
Uno de los nuestros avistó un demonio cuyos números 
eran seis seis seis, siete siete siete, ocho ocho ocho, 
en fin, una bestia a mi aprecer ya que carecía 
de un rostro como todos nosotros.

Los días pasaron y cambiamos de cielo, de luna y 

de órbita, al diablo con eso.
Sonaba entonces la canción que resucita y las 

páginas estaban llenas. Apareció parhelio.

Qué romántica fue la crucifixión de nuestro maestro, 

apenas y llegamos a tiempo, pero llegamos es lo importante.

Parecía como si él supiera todo el tiempo que lo 

iban a cocinar, pero bueno.

El pan es pan, y el vino, vino.


-Alejandro

El brazo invisible

Recortes tuyos surjen, declaración 
de subconsciencia.
Lo que antes me hacía feliz hoy 

me avergüenza.
 

Cada intervalo de tiempo en 
tu existencia delineado en lienzos 
infrarojo, ultravioleta, rayos x.

Brazo invisible me extrajo de este plano.
Invertir en tus apariciones fue religión degradante.

El camino huele a vómito, escupes exoplanetas.
Estrellas, todas te observan, ahora 

eres el monstruo que espía.

Episodios y críticos renglones, todos tuyos.
Mil años no te alcanzan.
Poema dividido en tres vidas eternas

no te alcanzan.


-Alejandro

Algo

Adquiriendo códigos a través de los años.
Y al verse sorprendidos, descifrados, 

decodificados, el Ser por fin se liberó.

Cada fracción de tu tiempo está hecha 

de millones de futuros,
el universo no se expande por expandirse.
El espacio no tiene fin, 

el tiempo tampoco, tú tampoco.

Estar a tiempo sin estar listo, 

es igual a no estar.
Llega cuando estés listo, 

no cuando marquen las siete en punto.

Cada renglón gotea como hormonas 

en tu pineal a lo largo del día, donde odias,
y de la noche, donde amas.

Deseas llevarte a toda tu familia 

y solitario descubres que tu familia 
está en tu espejo y en tus zapatos.


-Alejandro

Super cuerdas

Cuando desciendes a este mundo,
como meteorito cayendo en la 

estratosfera, los recuerdos de 
tu memoria pasada arden.

Y desaparecen cenizas con 

un nuevo comienzo, yo quiero saber 
de tu comienzo, nuevas risas, 
nueva piel y nuevos llantos.

Yo quiero saber más de tu piel y 

más de tus llantos.


-Alejandro

Adiós

Que descansas muriendo, cavalgamos sobre átomo.
Un trueno más, mides segundos en que suena:
Trescientosmil kilómetros por segundo la luz, 

trescientosmil metros por segundo el sonido.

Ya no eres persona, eres un mito, conversaciones 

incompletas ante pensamientos bien elaborados.

Grita por largos minutos que son sólo un juego, 

todo es mentira.
Tus riesgos de encarnar tus vidas pasadas, 

entran por tus oídos en forma de música, 
risa eterna que da risa.

Trance al fin como siempre lo soñaste, 

respirabas muerte y hoy 
redefines tus dos amores platónicos, 
amas la vida y amas la muerte.

Leyeron en silencio todos los cuerpos 

culpables del shock verde en el cielo, 
de que el mar haya caído, la monedas.

Todas las voces hablan, sólo una resuena 

y vibra más rápido que el Gamma.

Dijiste lo que sientes, lo que piensas, 

deseas y necesitas. 
Ahora sólo dices lo que eres.

Me cuesta pronunciar cinco sonidos, a-d-i-ó-s.


-Alejandro

Eyes wide open

Lo que no funciona, funcionará.
Y no controlas tus manos, persiguen otro sueño.
 

Están poseídas se piensan alas.

Cuando nos vimos las miradas, 

sentimientos se acribillaron.
Tú seguías mi rastro, yo seguí tu rostro, 

estaba inmerso en cerveza.

Te conocí pero no te conocí, 

un día te escribí pero nunca leíste 
la correspondencia tuya.

Miles me hablaron de ti, yo siempre me negué,
esa era la señal y nunca escuché nada.


Hoy no te veo, no me ves, somos demasiado invisibles.
Nunca te voy a olvidar.


-Alejandro

Eres mito

Ya no he de necesitar dormir  ni comer, 
estos pies hoy son movidos por otra fuerza.
 

Hoy cabalgo libre cuesta arriba y de frente 
al cerro, ya no me es necesario ni el caballo, 
ni el pegaso y nisiquiera el unicornio.

Porque hoy cabalgo sobre la luz, sobre mi propia luz.

Estoy feliz por tu existencia, más no dependo de ella.


A lo lejos no me divisas puesto que no tengo forma, 

y cuando estoy cerca me confundes con el viento 
frío o cálido según tu estación.

Frente a frente cada doscientos cuarenta días, 

mientras no descubramos lo contrario.

Yo no estoy huyendo, cosa inversa, todo va regreso a casa.


-Alejandro

El mismo sello

La alegría, pasajera poco común, 
vives en Andrómeda.
Euforia ¿a dónde vas? Hoy necesito tu hábitat.
 

Los fuegos pirotécnicos te hablan a ti
que estás estallando más fuerte.

Te sientes ridícul@ puesto que reír no 

es lo tuyo, pero ¡qué más da! Hoy
miraste al cielo y había ¡tres lunas!


El vino es cascada que no termina al mar 

y nadie ocupa tu mente, qué alegoría de 
la ballena sin ojos que desea morir a tu lado.

¡Qué viento! Anuncia el futuro que tanto 

leíste en tus cartas.
Culminación en tu vida, ya no idealizas, ya no fanatizas,
no especulas ni te autodestruyes.

La alegría ha bajado del tren, venticuatro 

horas se disuelven.
Vuelves al espejo, rezas mientras caminas... 

l@ miras a los ojos,
eres tú, todavía eres tú y estás en Tierra.


-Alejandro

Relato breve sobre la creación

Un gran ruido, lo que antes era uno, ahora es dos.
Un daño en tu cerebro que aún no existe, 
el pensamiento que no ha tomado forma
choca nebulosa, mitos sobre el flujo del tiempo. 

Ríes, el tiempo es una ilusión, un juego de administración.

Lo que antes era dos, se convierte en tres mil 
billones de millones de soles, cada uno con hij@s,
planetas con su historia, con tu historia y su propia luz.

Crear es lo único, no existen cinco sentidos, 
no existe el sentido.
Un amanecer decides ver, oír, oler, 
sentir, probar y leer la mente de todo 
el universo simultáneamente.

Hoy estás insignificante, sentad@ 
escribiendo todas tus memorias, 
los recuerdos de cuando eras Dios.
Creas el miedo, la moda del mundo. 
Sentenciado a temer, no paras de fumarte 
tu hogar, nuevas especies reclaman.

Y tú respondes al llamado, respondes con 
un nuevo peinado y una nueva moda obscura.
Luz verde en el polo congelado, es la señal, 
el Arcano sin nombre viene a realizar, 
tu respuesta, una vez más, pintar, pintar y pintar.

Lo bueno y lo malo distracción que te conmueve, 
vives pero no vives, muerto entre las masas 
te transformas en engrane y recorres los diez mil días
rezando por unos segundos de la belleza prometida.
 
Día diez mil, toda tu vida en un flashazo y 
recuerdas cuando estabas list@ para parir, 
hoy estás list@ para partir.

El día gris, las aves no producen el gran ruido, 
yaces entre dos niveles de tu sagrada Consciencia, 
ya no hay dudas, ya no hay modas, ya no existe el temor.

No hablas puesto que tienes pensamiento, 
tu lengua sólo es un bello recuerdo que gusanos deleitaron.
Telarañas azules te conducen, 
música sin instrumentos, lograste la felicidad. 

Y haces inventario de todas tus vidas, 
diseñas el próximo viaje, siempre habrá guías.

Evolución accidentada, a costa de la sangre 
recorriendo el suelo, estás avergonzad@, fuiste un mono, 
pero gira el reguilete y ya naciste.

El mismo Sol, el mismo hogar, tu hijo es tu padre, 
tu padre es tu hijo. 
Te liberas, llegas luz y gritas un gran ruido.

El campo es testigo, desapareces y esta vez no 
corre sangre, velocidad en tus células, saludas al vacío 
y eres la perla anhelada en tu pecho.
Deseas llorar pero no existen las lágrimas, 
ya no hablas de amor, eres el amor mientras
me cuentas esta historia.


-Alejandro

La mentira

Soñé que caía nieve 
en forma de tormenta 
y que la humanidad 
tenía sentimientos 
encontrados, puesto que 
estaba alegre por la blancura 
del cielo, pero a la vez aterrada 
por la velocidad de su
descenso, de su precipitación.


-Alejandro

Pueblo mágico II

Iniciaría yo una charla, una mirada, 
un camino, un noviazgo,
un hogar, una comuna, 
una tribu, una villa, 
una ciudad, un país, 
un continente, un planeta, 
una constelación, una galaxia, 
un universo, un todo, una nada, 
ultraconsciencia que ya no podemos
ser dos almas separadas, 
a partir de hoy, eres conmigo 
y siempre lo has sido.



-Alejandro